Carlos Ramón González, el exalfil del presidente Petro que está a un paso de ser prófugo por escándalo de la UNGRD

Bajo el ala del presidente Gustavo Petro, Carlos Ramón González Merchán pasó de ser un joven escolta del M-19 a ocupar uno de los cargos más sensibles del Estado como director del Departamento istrativo de la Presidencia de la República. Silencioso, hábil tejedor de alianzas y considerado uno de los poderosos de la Alianza Verde -partido al que renunció tras el escándalo-, hoy la Fiscalía pidió su captura tras señalarlo de haber articulado millonarias coimas a congresistas con dineros desviados de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD). 

González es uno de los cuadros más cercanos al presidente Petro. Su amistad, nacida hace más de 40 años en las filas de la insurgencia y consolidada en años de vida política, lo llevó a ser nombrado primero como director del Dapre -y jefe de gabinete-y luego como jefe de la Dirección Nacional de Inteligencia (DNI). 

Su nombre volvió a sonar con fuerza en un expediente que sacude al petrismo por el saqueo a la Unidad. Según la Fiscalía, en 2023 González habría coordinado, junto con el exdirector de la UNGRD Olmedo López, la entrega de 70.000 millones de pesos en contratos y 4.000 millones en efectivo a los expresidentes del Senado, Iván Name, y de la Cámara, Andrés Calle.

El ente investigador le imputó a González los delitos de cohecho por dar u ofrecer, lavado de activos y peculado por apropiación en favor de terceros, cargos que no aceptó.

Los congresistas, quienes fueron las más altas fichas del Capitolio, según el auto de la Corte Suprema que ordenó su captura, habrían respaldado las reformas del Ejecutivo en el Legislativo. La exconsejera Sandra Ortiz, señalada de servir de enlace en el pago de las coimas, también está tras las rejas.

“Era necesario cumplirles”, le habría ordenado González a López, según audios presentados este viernes por la Fiscalía. Las reuniones —de acuerdo con el testimonio de López— se daban en privado, a puerta cerrada en el Palacio de Nariño, y los acuerdos se habrían sellado con discreción.

González, durante más de dos décadas, supo moverse entre bambalinas, construyendo el andamiaje político que hizo de los verdes una fuerza nacional y articulando alianzas entre sectores alternativos y de centro, convirtiéndose en uno de los hombres del Presidente.

Fue artífice de la recordada “Ola Verde” que llevó a Antanas Mockus a disputar la presidencia en 2010, y del acuerdo que permitió el ingreso del petrismo a la Alianza Verde en 2013.

Tras destaparse el escándalo, González habría viajado a España. Mientras su abogado Iván Cancino asegura que su salida del país responde a “motivos personales”, fuentes del proceso sostienen que estaría gestionando asilo en el país ibérico.

Sin embargo, la fiscal a cargo del caso, María Cristina Patiño, hizo fuertes reparos contra Carlos Ramón González, imputado por tres delitos dentro del escándalo de la UNGRD, debido a que no se conoce su paradero desde que salió rumbo a Costa Rica, alertando que luego de un rastreo a la IP de su celular, es posible que se encuentre en Managua, la capital de Nicaragua.

Si el Tribunal Superior de Bogotá acoge la petición de la Fiscalía, se emitiría una orden internacional de captura, lo que marcaría un giro para quien hasta hace poco tenía línea directa con el despacho presidencial.

La Fiscalía empezó a reproducir audios de declaraciones de Olmedo López, quien delató a sus presuntos socios para conseguir beneficios. En un interrogatorio de la Fiscalía, el exjefe de la UNGRD dijo que se vio con González "entre el 18 y 21 de septiembre en el Palacio de Nariño. Las convocatorias del doctor Carlos Ramón siempre era 'nos vemos tal día', era voz a voz, y había momentos en los que se aprovechaba de la agenda, aprovechábamos los tiempos de los consejos de ministros, porque llegábamos dos horas antes".

Al momento de tocar los pactos con el Congreso en los que se entrarían contratos de la Unidad a cambio de votos, manifestó que en una de esas citas de septiembre, González "allí me da la orden, que era necesario cumplirle. El tema era tenso en el Congreso, el presidente del Senado no caminaba, Iván Name, y que él había llegado a acuerdos con ellos", narró López sobre lo que le decía González.