Con el objetivo de impulsar la transformación económica en zonas históricamente afectadas por los cultivos ilícitos, el Ministerio de Defensa llevó a 15 campesinos del Catatumbo hasta Guerima, Vichada, para conocer de cerca un modelo exitoso de sustitución.
Más de 850 familias de esta región, que en el pasado se dedicaban a la siembra de coca y al procesamiento de droga, hoy se sostienen en el cultivo legal de cacao y aguacate.
La visita forma parte de la estrategia gubernamental para promover la sustitución voluntaria de cultivos ilícitos, articulando esfuerzos con la Dirección de Sustitución Voluntaria de Cultivos, el Banco Agrario, la Agencia de Desarrollo Rural, la Embajada de Suecia y empresas privadas.
Mindefensa en la zona de sustitución de cultivos. Foto:Cortesía
Durante el recorrido, los campesinos del Catatumbo conocieron fincas cacaoteras que suman cerca de 900 hectáreas productivas, ejemplo del impacto positivo de esta iniciativa.
El proceso de transformación en Guerima, Chupaba y Puerto Príncipe, conocido como el “Triángulo del Cacao”, surgió tras años de violencia y dominio de grupos armados ilegales. En los años 80, narcotraficantes desplazaron a campesinos para imponer el cultivo de coca y el procesamiento de drogas, bajo el control del entonces cabecilla de las Farc en la región, Tomás Medina Caracas, alias “Negro Acacio”.
La neutralización de este líder en 2007 durante la Operación Sol Naciente permitió avanzar en la recuperación del territorio mediante presencia institucional, seguridad y desarrollo productivo.
Visitaron las siembras de maiz y cacao. Foto:Cortesía
Desde 2016, la Fuerza Aeroespacial Colombiana ha transportado más de 110 toneladas de cacao desde Guerima hacia Bogotá, garantizando la comercialización a través de empresas como Casa Luker. Esta cadena comercial ha generado ingresos estables y ha fortalecido la confianza de los productores, quienes hoy ven en la legalidad un camino hacia el bienestar.
La segunda fase del proyecto contempla llevar a campesinos del Vichada al Catatumbo para que compartan sus testimonios y experiencias de transformación con las comunidades locales.
Con esta estrategia, el Ministerio de Defensa busca replicar el modelo exitoso de Guerima y contribuir a la consolidación de economías legales y sostenibles en el Catatumbo, fomentando el desarrollo rural, la seguridad y la paz.
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