Editorial

Cuidado: si no consume lo suficiente de esta vitamina, puede ser factor de riesgo ante el sarampión en EE. UU.

• Los expertos señalan que esta situación puede agravar los síntomas de la enfermedad.

El mapa 100% real que muestra los estados afectados por el sarampión en Estados Unidos

Así se ven los sarpullidos del sarampión en las personas. Se debe estar atento a las señales. Foto: iStock

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Leslie Santana

REDACTORA09.06.2025 09:57 Actualizado: 09.06.2025 09:57

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Con los recientes brotes de sarampión en Estados Unidos, es importante mantenerse bien informado acerca de la enfermedad. En ese sentido, los expertos han señalado que la deficiencia de esta vitamina puede empeorar los síntomas del virus.

De acuerdo con Mayo Clinic, no consumir suficiente vitamina A puede agravar los efectos del sarampión. Esta desempeña un papel esencial en el buen funcionamiento del sistema inmunológico, y su insuficiencia puede aumentar la gravedad y el riesgo de complicaciones.

La vitamina A, presente en alimentos como la zanahoria, el camote, la espinaca, el hígado y los productos lácteos, es crucial para mantener en buen estado las mucosas, la piel y los tejidos que actúan como barreras contra infecciones.

Su deficiencia se ha asociado históricamente con un mayor riesgo de infecciones respiratorias y oculares, pero también con un cuadro más severo de sarampión, especialmente en niños pequeños.

Algunos alimentos son ricos en esta vitamina. Foto:iStock

¿Cuáles son los síntomas del sarampión?

Los expertos señalan que el sarampión aparece entre 10 y 14 días tras la exposición. Los síntomas regulares son:

Comienza con fiebre, tos seca, dolor de garganta, conjuntivitis y manchas de Koplik.
Luego surge un sarpullido que se extiende por el cuerpo.
La fiebre sube y los síntomas duran varias semanas, con una recuperación gradual y lenta.

Cómo prevenir el contagio de sarampión

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) recomiendan mantener el esquema de vacunación al día, especialmente en los niños.

También es aconsejable prestar atención al estado nutricional, ya que una alimentación deficiente puede ser un factor determinante en la evolución de enfermedades virales.

Así, además de vacunar, comer bien es una de las formas más efectivas de protegerse. En tiempos donde los brotes son impredecibles, asegurarse una buena ingesta de vitamina A puede marcar la diferencia.

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