Radiografía de peajes en Cartagena: inició el desmonte de casetas en Ceballos y Manga

El Distrito de Cartagena inició el desmonte definitivo de las viejas casetas para pejes ubicadas en Ceballos y Manga, entre el área industrial de Mamonal y la Sociedad Portuaria.

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Acompañado por su equipo de Gobierno, desde el peaje de Ceballos, el alcalde Turbay Paz constató, tras su socialización previa con las comunidades, el comienzo de las obras que incluyen el desmonte de cada una de las casetas ubicadas en los barrios Ceballos y Manga.

La esperada obra, entre las acciones más solicitadas en la historia ciudadana de Cartagena, además del proceso de desmonte de las casetas en ambos barrios, incluye la priorización de obras de urbanismo y señalización, las cuales serán llevadas a cabo durante los próximos 45 días.

Según la veeduría ciudadana Funcicar, el desmonte de estas estructuras tiene un costo de 604 millones de pesos, así: El desmonte del peaje de Manga tendrá un costo de $248.388.769; mientras que el de Ceballos vale $355.940.493.

El plazo para ejecutar las obras es de 45 días.

Pero el burgomaestre cartagenero va más allá y ha prometido que además serán desmontados, este año, los otros dos peajes ubicados en Mamonal: La Heroica, en Paque América, y el peaje del Corralito de Piedra.

El quinto peaje 'India Catalina', ubicado en Vikingos, fue desmontado en el año 2014 gracias a una acción popular.

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Una vez sean demolidas las casetas, lo que sigue es encontrar fórmulas de financiación y avanzar en la siguiente fase: adquirir los recursos para el mantenimiento del corredor de carga, que antes era intervenido por la concesión vial, la empresa que durante más de dos décadas se lucró de los peajes en este corredor estratégico hacia los puertos.

Tuvieron que pasar más de dos décadas y un largo pulso jurídico entre el Distrito, veedores y la Concesión Vial- y que incluso tuvo la intervención de Procuraduría y Contraloría- para que en la Ciudad Heroica se desmontaran los peajes internos. Un jugoso negocio entregado a privados a finales de la década de los 90.

No obstante, fue en un Laudo Arbitral, conocido por el país el 31 de mayo del 2023, donde la justicia ordenó la liquidación del contrato de peajes a la concesión. Un fallo final y ley aceptada por las partes.

En julio del 2023 el exalcalde William Dau firmó la resolución que tramitó la liquidación definitiva del contrato y la reversión de recursos en manos de la Concesión Vial.

“Nos preocupa la reversión de recursos a la ciudad. La concesión vial habla de una reversión automática; pero el corredor de carga hoy está en el abandono. Las oficinas fueron vandalizadas, porque las directivas de la concesión, apenas conocieron el laudo arbitral, desocuparon, se llevaron los equipos, aires acondicionados, muebles y grúas. Las motocicletas y carros fueron vendidos. Todo lo que estaba relacionado al proyecto debía ser entregado al Distrito en perfecto estado”, denuncia Fidian García, el ‘Capitán Cartagena’, el héroe de capa roja y camisa verde que lucha contra los peajes internos de la ciudad, y uno de los veedores más recalcitrantes en esta batalla de los cartageneros.

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¿De dónde saldrán los recursos para mantener la malla vial del corredor de carga?

El alcalde Turbay Paz propone crear un fondo para mantener la malla vial de Cartagena tomando como base el dinero que la concesión vial le tiene que devolver al Distrito.

Se trataría de millonarios recursos que esta empresa cobró a los conductores del corredor de carga entre noviembre del 2020- cuando se cumplió la tasa interna de retorno que la ciudad debía entregar a la empresa por obras en este corredor- hasta junio del 2023 cuando se hizo efectivo el laudo arbitral.

“Existe una fiduciaria con una cuenta de excedente de peajes, pero la ciudad aún no sabe cuánta plata hay. Ese dinero debe ir al fondo para mantener la malla vial”, añade García.

Sin embargo, ese fondo debe ser creado a través de un acuerdo distrital para canalizar esos recursos exclusivamente para obras de mantenimiento y modernización del corredor de carga.

Ese fondo debería alimentarse de los impuestos que pagan Contecar, Muelles el Bosque, Al Granel y el mismo puerto de Cartagena en Manga, entre otras empresas, que son los directamente beneficiados con la movilización de camiones de carga pesada por el corredor vial.

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“Estas empresas hoy pagan una contraprestación portuaria, pero el 80 por ciento de estos recursos se van para Bogotá por el uso de la infraestructura de los muelles, solo el 20 por ciento queda para la ciudad. No hay un equilibrio fiscal, y lo que pedimos hoy es que, a través de Invias, la ANI y el Ministerio de Transporte, la regla de invierta y el 80 por ciento se quede para Inversión del Distrito y para el mantenimiento del corredor de carga, la troncal de occidente, incluso la vía de la cordialidad y el 20 por ciento se le entregue a Bogotá”, sostiene el veedor.

El alcalde Dumek Turbay también propone un cobro especial para camiones de carga pesada y tractomulas a la entrada y salida de los puertos.

A diferencia del corredor de carga, en esta zona de Cartagena las tensiones entre comunidad y estado continúan por cuenta de un peaje que nadie quiere: Marahuaco.

Este peaje, ubicado en la Vía al Mar, ya pagó una primera concesión a finales de la década de los 90.

Sin embrago, en el 2019 inició un nuevo contrato con la Concesión costera vía de la prosperidad Cartagena- Barranquilla.

Desde entonces, las comunidades de Arroyo Grande, Arroyo Hondo y Arroyo de las Canoas se unieron y han protagonizado una veintena de protestas y bloqueos.

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Además, instauraron una Acción Popular que tienen fallo en segunda instancia a favor de las comunidades el cual ordena la reubicación del peaje en el kilómetro 42, como lo establecían los diseños iniciales; sin embargo, el estado no lo ha cumplido.

Hoy, los viajeros que transitan por este corredor pagan uno de los peajes más costosos de la nación:

Autos: $18.400.

Autos (tarifa especial): $3.000.

Buses: $27.600.

Buses (tarifa especial): $3.000.

Camiones 2 ejes pequeños: $20.200.

Camiones 2 ejes grandes: $35.000.

Camiones 3 y 4 ejes: $109.100.

Camiones 5 ejes: $145.500.

Camiones 6 ejes o más: $161.600.

“Este peaje solo le ha traído atraso a nuestra región, pese a que estamos frente al mar y hay playas, la gente prefiere quedarse en las playas de Cartagena, o, del otro lado, en Puerto Colombia”, sostiene Miguel Marrugo, líder de Arroyo Grande.

En las últimas horas el personero de Turbaco, Iván Roca, hizo un urgente llamado al Director de la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI), concesión vial Ruta Caribe, al Ministerio de Transporte y autoridades de orden departamental para abordar de manera integral la problemática e incertidumbre que rodea a los turbaqueros la situación del peaje en este municipio.

De acuerdo con Roca, la apertura y cobro en las categorías 1 y 2 del peaje, prevista para el 16 de febrero próximo, plantean preocupaciones significativas, ya que se prevé un impacto directo en los costos de la canasta familiar, que afectaría a numerosas familias turbaqueras y de municipios vecinos.

El funcionario señaló que: “Grupos significativos del municipio expresan abiertamente su rechazo a la reapertura del peaje, alegando que es totalmente ilegal y que las obras propuestas no proporcionan beneficios sustanciales para Turbaco. Además, se anticipa que iniciarán jornadas de protestas en contra de esta medida, subrayando la tensión y desacuerdo en torno a la situación”, sostiene el personero.

El Personero Municipal hace un llamado a la sensibilidad y consideración de las autoridades correspondientes para encontrar una solución que equilibre las necesidades de la infraestructura vial con el bienestar de las comunidades afectadas.

La situación del peaje es hoy un punto crítico que demanda atención inmediata y acciones concretas para evitar mayores tensiones y descontento Turbaco y sus alrededores.

Corresponsal de EL TIEMPO

Cartagena

En X: @PilotodeCometas