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Bogotá entregó a Jineth Bedoya el Jardín de ‘No Es Hora de Callar’: un símbolo contra la violencia de género

El acto de entrega del monumento en el parque Nacional fue una reparación simbólica en el caso de la periodista.

ogotá mayo 25 de 2025. Acto en el parque nacional jardín No Es Hora de Callar, este 25 de mayo el Día nacional de la dignidad de las mujeres víctimas de violencia sexual en el marco del conflicto armado, este lugar símbolo contra las violencias basadas en género.
Fotos: @Miltondiazfoto / El Tiempo — El jardín tiene un árbol plantado en conmemoración a cada una de las víctimas de violencia de género y feminicidio. Foto: Milton Díaz / EL TIEMPO

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Maria Paula Rodriguez Rozo

26.05.2025 00:21 Actualizado: 26.05.2025 06:23

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En el Día Nacional por la Dignidad de las Mujeres Víctimas de Violencia Sexual en el Marco del Conflicto Armado Interno, la Alcaldía de Bogotá entregó el Jardín de memoria ‘No Es Hora de Callar’ a Jineth Bedoya Lima, periodista, activista y editora de género de EL TIEMPO.

El monumento está ubicado en el parque Nacional, a unos metros de donde fue encontrada hace 13 años Rosa Elvira Cely con hipotermia, semidesnuda y con golpes en su cuerpo. Este es un homenaje a las mujeres víctimas y sobrevivientes de las violencias basadas en género.

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El acto correspondió a una medida de reparación en el caso de Bedoya, quien fue víctima de secuestro, tortura y violencia sexual hace exactamente 25 años, y de miles de mujeres que han sido blanco de este atroz crimen.

“Este va a ser un gran ejemplo de lo que es resistir a través de la memoria”, aseguró Bedoya, periodista y editora de género de EL TIEMPO durante la entrega.

(Lo invitamos a visitar: Jardín No Es hora de Callar: en honor a las víctimas de violencia de género)

Jineth Bedoya ha sido activista por las mujeres víctimas de violencias basadas en género. Foto:Milton Díaz / EL TIEMPO

Conmemoración por las víctimas

El Día Nacional por la Dignidad de las Mujeres Víctimas de Violencia Sexual en el Marco del Conflicto Armado Interno se celebra cada 25 de mayo, según el decreto 1480 de 2014.

Esta fecha fue elegida en homenaje a Jineth Bedoya. Su caso se convirtió en un símbolo de lucha contra la impunidad; y ella, en una voz que visibilizó a miles de mujeres silenciadas por este tipo de violencia.

La conmemoración busca dignificar a las víctimas, rechazar la violencia sexual como arma de guerra y exigir justicia, verdad y garantías de no repetición.

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La Unidad para las Víctimas en su boletín ‘Datos para la Paz’ de noviembre de 2024 reveló que en Colombia hay 39.351 mujeres víctimas de violencia sexual en el marco del conflicto armado interno.

El caso de Jineth Bedoya

Los hechos de violencia en contra de Bedoya se desencadenaron el día 25 de mayo del año 2000 cuando entró a la cárcel La Modelo, citada por una fuente paramilitar, para realizar una entrevista.

Con la promesa de seguridad, la periodista llegó hasta el recinto penal y fue secuestrada.

Fuera de la cárcel, sobrevivió a 16 horas de ultrajes –tortura y violencia sexual– que dejaron marca en su cuerpo y espíritu. Sus agresores tenían un mensaje claro al que ella hizo oídos sordos: querían callar la verdad. Pero, 25 años después, Bedoya sigue en pie, hablando por ella y otras mujeres que reclaman justicia.

Un espacio para resignificar la violencia

Carlos Fernando Galán, alcalde de Bogotá, indicó que este jardín significa un paso importante para reparar, reconocer, promover la conciencia pública y resignificar el espacio público.

Bogotá mayo 25 de 2025. Acto en el parque nacional jardín No Es Hora de Callar, este 25 de mayo el Día nacional de la dignidad de las mujeres víctimas de violencia sexual en el marco del conflicto armado, este lugar símbolo contra las violencias basadas en género.
Fotos: @Miltondiazfoto / El Tiempo — Revelación de la placa de Yuliana Samboní, una niña de 7 años y víctima de feminicidio en 2016. Foto:Milton Díaz / EL TIEMPO

“Hoy honramos a las mujeres víctimas y a todas las que, con su vida y lucha, nos recuerdan que ni hoy ni nunca es hora de callar”, dijo el mandatario.

El jardín fue entregado inicialmente con ocho placas que conmemoran a mujeres víctimas de violencia sexual y de género. Está proyectado que en el futuro sean 40 en total.

Cada una tiene un nombre y una historia para recordar.

Una de ellas tiene el nombre de Jineth Bedoya, quien ha resignificado su dolor para convertirlo en una lucha colectiva por medio del activismo y la fundación No Es Hora de Callar (NEHDC).

Las otras siete tienen el nombre de niñas y mujeres que fueron víctimas de feminicidio y no pueden contar su historia. Sus nombres —Yuliana Samboní, Viviam Urrego, Tatiana Fandiño, Rosa Elvira Cely, Claudia Rodríguez y Tatiana Grueso— quedan en un espacio público como recordatorio de sus vidas.

El alcalde de Bogotá señaló durante la ceremonia que el jardín será un recordatorio y una marca en la memoria de la sociedad. “El acto de memoria debe visibilizar y romper el silencio. Pero, sobre todo, es resistencia contra la impunidad”, dijo Galán.

El secretario distrital de Gobierno, Gustavo Quintero, resaltó que el parque Nacional, después de haber sido un escenario de violencia por años, se convierte en un espacio de convivencia, paz y memoria con este acto.

“Aquí en la ciudad hay un espacio donde se habla de quienes ya no están y lo hacemos con el mayor compromiso y respeto por ellas. Eso se debería replicar en todas las ciudades del país”, afirmó Jineth Bedoya.

EL TIEMPO adopta el jardín 'No Es Hora de Callar'

La responsabilidad por la conservación del jardín fue asumida por la Casa Editorial EL TIEMPO y la fundación NEHDC como parte del programa ‘Adopte un monumento’, del Instituto Distrital de Patrimonio Cultural (Idpc).

“Esa es nuestra responsabilidad social como medio de comunicación”, indicó Bedoya. Para la periodista, este acto de adoptar el jardín es una forma de decir que el deber de EL TIEMPO va más allá de informar. Es asumir un compromiso de apoyar en su conservación y divulgación como monumento nacional.

El jardín ya había sido entregado una vez por la exalcaldesa Claudia López a finales del 2023, dos años después de que la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Cidh) ordenara medidas de reparación colectivas por el caso. Sin embargo, las labores de restauración tras la estadía de los indígenas emberá en el emblemático espacio verde la dejaron destruida.

La importancia de resistir al olvido

Isabelita Mercado, consejera de Víctimas, Paz y Reconciliación, reiteró el compromiso de Bogotá para la prevención y eliminación de los delitos de violencia sexual. Asimismo, resaltó la importancia de hacer memoria para resistir el olvido, el silencio y la invisibilización para dar garantía de la no repetición.

La secretaria de la Mujer, Laura Tami, recordó durante la ceremonia que, lamentablemente, Bogotá ya ha registrado más de 10 casos de feminicidios en lo que va del 2025.

La entrega de este espacio se dio pocas semanas después de que Jineth Bedoya desistiera públicamente del proceso judicial de su caso que se llevaba en la Fiscalía General, que hasta ahora sigue inconcluso.

“Yo renuncié a mi justicia, pero no renuncio a la justicia de las mujeres”, recordó la periodista a la sociedad durante su discurso de agradecimiento.

El jardín quedará en pleno corazón del parque Nacional, frente a la torre del reloj; en un punto turístico donde residentes y visitantes de Bogotá podrán recordar cada caso de las mujeres víctimas de violencia de género.

MARÍA PAULA RODRÍGUEZ ROZO

Escuela de Periodismo Multimedia EL TIEMPO

[email protected]

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