Cuando se habla de abonos a capital, surge una pregunta común: ¿es más conveniente reducir el plazo o la cuota mensual? Por ello, se explorará la importancia de acelerar los pagos y se proporcionará respaldo teórico para esta estrategia financiera.
Se puede imaginar a alguien adquiriendo un automóvil, financiándolo con un préstamo de 35 millones a 72 meses y una tasa del 19% Efectivo Anual, lo que lo deja con una cuota mensual de $788,845. A primera vista, puede parecer tentador mantener el plazo completo, pero ¿realmente es la opción más sensata?
Si la persona completa los 72 meses, habrá pagado $21.796.840 adicionales. Además, se debe considerar que los bienes, como los automóviles, tienden a depreciarse con el tiempo. Así, el vehículo que fue adquirido por 35 millones podría valer mucho menos al final del plazo de pago.
Estrategias de Abono a Capital
- Reducción de Plazo: Imaginemos que la persona decide hacer un abono a capital de $3.000.000 en el mes 12. Este simple movimiento tiene impactos significativos: primero, la reducción de tiempo, el plazo se reduce a 64 meses, ahorrándole 8 meses en total y segundo, ahorro monetario, la cantidad total ahorrada alcanza los $6,310,757.
- Reducción de Cuota: Otra opción será reducir la cuota mensual. Con un abono a capital, donde la nueva cuota se establece en $713,442, hay un ahorro mensual de $75 mil pesos y un ahorro total de $4,524,142.
Abonos Inteligentes a Capital
Ahora, se debe considerar una estrategia más proactiva, realizar abonos mensuales de $100.000. Este enfoque inteligente resulta en: primero, reducción de tiempo, el plazo disminuye a 60 meses, ahorrando un año completo y en ahorro monetario, ya que se abonan $5.900.000 en total, ahorrando $9,466,136 en intereses.
Varios estudios financieros respaldan la idea de reducir el plazo. La teoría del valor temporal del dinero indica que un dinero hoy vale más que el mismo monto en el futuro. Al reducir el plazo, se disminuye el impacto de los intereses acumulados, lo que se traduce en ahorros significativos a largo plazo.
Cuando alguien se enfrenta a la decisión de realizar abonos a capital, la estrategia inteligente es clara: reducir el plazo. Al hacerlo, no solo ahorra dinero, sino que también optimiza sus finanzas y se libera más rápidamente de las obligaciones financieras. Aprenda más sobre este tema en las redes sociales de Claudia Uribe.